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BAHIA, Brasil –  Los jóvenes están tomando la iniciativa contra el Zika en los barrios marginales y las favelas de Brasil, en donde las malas condiciones sanitarias han provocado una proliferación de enfermedades transmitidas por mosquitos, incluidos  el dengue, el Chikungunya y el virus del Zika.

Lea la historia en inglés aquí.

“Los jóvenes fueron los primeros en tomar la iniciativa en la detección de la epidemia del Zika en nuestra comunidad”, afirma Mariselma Bonfim, integrante de la REPROTAI, una organización juvenil que trabaja con el UNFPA para divulgar información sobre salud en el suburbio de Salvador, en Bahia, uno de los estados más afectados por el brote del Zika.

Durante una tarde reciente, un grupo de integrantes de la REPROTAI realizó visitas casa por casa en un sobrepoblado barrio marginal para platicar con sus residentes acerca de la importancia de mejorar el saneamiento ambiental, como parte de una serie de esfuerzos para reducir los criaderos de mosquitos y evitar la propagación de la enfermedad.

Al momento de llegar al vecindario, los integrantes de la REPROTAI se encontraron con un grupo de adolescentes chapoteando en medio de una cloaca a cielo abierto para aliviar el calor. Y no podían creer lo que estaban viendo. Son precisamente condiciones  como estas –la falta de agua limpia y la proximidad a encharcamientos de agua sucia– las que han acelerado la propagación de la enfermedad.  

“De inmediato se pusieron en contacto con el Coordinador del Distrito de Salud, y posteriormente se dirigieron a la cabecera municipal, en donde exigieron una solución”, afirma Mariselma. “Ahora nuestros jóvenes están dirigiendo diversas negociaciones con el fin de construir una respuesta eficaz para apoyar a la comunidad”.

Movilizándose para la acción

Antes del brote del Zika, el UNFPA trabajó con la REPROTAI –la Red de Protagonistas en Acción de Itapagipe–  para ayudar a los jóvenes a desarrollar habilidades para la vida. Los integrantes del grupo trabajan para concientizar a sus pares acerca de la importancia de evitar las infecciones de transmisión sexual, poner un alto a la violencia de género, el acceso a la atención a la salud reproductiva y otros temas relacionados con derechos.

Cuando el Zika llegó a la comunidad, resultó evidente que el origen del problema era el suministro de agua irregular. Incluso aquellas soluciones al suministro de agua deficiente, como el almacenamiento de agua limpia, promueven la propagación de la enfermedad.

Los integrantes de la REPROTAI entraron en acción de inmediato. “Su preocupación aumentó al enterarse de que el Zika no sólo estaba vinculado al mosquito, sino al ambiente mismo”, afirma Mariselma.

El Zika también puede transmitirse por vía sexual. Una vez que la persona se ha infectado, deberá usar condones para evitar la propagación del virus.

Silas Santos, una chica de 18 años integrante de la REPROTAI, explicó que están transmitiendo mensajes por radio y dirigiéndose a los miembros de la comunidad para promover la prevención del Zika.

“Lo que hacemos es compartir información acerca del virus del Zika, medidas de saneamiento básicas, acciones preventivas y cómo detener la propagación del Zika en nuestra comunidad”, afirma.

 

La enfermera Jacksonara Cunha, que trabaja en una instalación de salud en Salvador, afirma: “La única información que las mujeres tienen es aquella que reciben de los medios de comunicación, que además es muy vaga”. Los jóvenes integrantes de la REPROTAI están tomando la iniciativa para subsanar esas deficiencias. 

 

Incluso a mí me dio el Zika”

El brote ha  afectado de manera desproporcionada a las comunidades marginadas del Brasil.

“El noventa por ciento de los residentes de Lobato se han infectado con los virus del Chikungunya y el Zika”, afirma Lea Mendes, del vecindario de Lobato, Salvador, en donde el agua y las condiciones sanitarias han sido un problema constante. “Toda mi familia se contagió. Incluso a mí me dio el Zika”

Algunos miembros de la comunidad dirigieron a los voluntarios de la REPROTAI a la casa de una mujer de nombre Fernanda Ricardo. Su hija fue la primera en la comunidad en nacer con microcefalia, una devastadora complicación provocada por la infección del Zika durante el embarazo.

Durante su embarazo, la Sra. Ricardo, que tiene 35 años de edad, hizo todo lo que se supone que debía hacer. Además de cuidarse, acudió a consultas prenatales de manera regular. Pero un día sintió que algo estaba mal.

“A partir del quinto mes, lo único que experimenté fue dolor”, le comentó al UNFPA y la REPROTAI. “Mi bebé dejó de moverse. La barriga me crecía cada vez más y tuve muchas dificultades. Perdí el apetito, tenía un dolor constante en la espalda y la cabeza, y apenas podía salir de mi casa”.

La Sra. Ricardo compartió sus inquietudes con su médico, que determinó que el cráneo de la bebé no se estaba desarrollando como debería.

 

Fernanda Ricardo muestra un ultrasonido de su hija, Amanda Vitória, que padecía microcefalia relacionada con el Zika y falleció a menos de dos horas de haber nacido. Ahora que cuenta con nueva información acerca de cómo prevenir el Zika, la Sra. Ricardo se ha embarazado de nuevo.

“En el momento en que el doctor vio a mi bebé, me dijo que tenía microcefalia y otras malformaciones”, relata la Sra. Ricardo con lágrimas en los ojos. “No podía entender qué es lo que le había pasado. Su cabeza era más pequeña. Parecía tener varias discapacidades y su ritmo cardíaco era muy acelerado”.

Su bebé, Amanda Vitória, falleció a menos de dos horas de haber nacido. “No lloraba. Tenía una deformación facial. La coloqué sobre mi pecho y comencé a llorar como lo haría cualquier madre que hubiera estado en mi lugar. Una vez que la limpiaron me calmé, y entonces comencé a acariciarla y abrazarla”.

La tragedia desató temores en la comunidad, alertando a otras mujeres embarazadas de los riesgos que enfrentan como resultado de las malas condiciones ambientales.

Actualmente la Sra. Ricardo se encuentra embarazada de nuevo y está esperando un niño. Las mujeres acuden a ella para pedirle información acerca del Zika y el embarazo.

“He aconsejado a muchas mujeres embarazadas que me preguntan cómo son los síntomas. Estaban asustadas por lo que me sucedió”, comenta.

El UNFPA también se encuentra trabajando con el apoyo de diversas contrapartes, como la Fundación Oswaldo Cruz, Canadem, UK Aid, el Gobierno de Japón y numerosos grupos de la sociedad civil, para divulgar información acerca del Zika y promover la salud y los derechos sexuales y reproductivos.

Texto y Fotos: Tatiana Almeida 

Si desea obtener mayor información acerca del virus del Zika, le sugerimos visitar los siguientes enlaces:

Organización Panamericana de la Salud

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