CIUDAD DE PANAMA, PANAMA (11 de julio de 2011) – Hoy se conmemora el Día Mundial de la Población, en el año en que la población global alcanzará 7.000 millones de habitantes. En América Latina y el Caribe, 106 de sus 588,6 millones de habitantes son jóvenes de entre 15 y 24 años, lo que representa la mayor generación de jóvenes de la historia, el llamado “bono demográfico”.
En una región que es conocida por sus desigualdades, este bono es una oportunidad irrepetible que, a la vez, presenta desafíos inmediatos y amerita respuestas urgentes. Esta generación de jóvenes, la más numerosa de la historia, necesita empleo, educación y salud reproductiva para poder contribuir con todo su potencial a la sociedad.
Esta oportunidad y el llamado a la acción convergen en la campaña “7 Mil Millones de Acciones”, que el Fondo de Población de las Naciones Unidas lanza a nivel global en el Día Mundial de la Población, en colaboración con sus socios y que culminará cuando el 31 de octubre nazca la persona número 7 mil millones, de acuerdo a las proyecciones de la División de Población de las Naciones Unidas.
La campaña busca conectar a jóvenes y adolescentes para que sean protagonistas de su propio desarrollo. América Latina y el Caribe, por ejemplo, constituye la segunda región del mundo con mayor prevalencia de embarazo adolescente (72 nacimientos por cada 1.000 mujeres de entre 15 y 19 años), una de las barreras para continuar con su educación y acceder al empleo. Además incide particularmente en la mortalidad materna, el Objetivo de Desarrollo del Milenio más rezagado, con 85 muertes por cada 100.000 nacidos vivos en la región.
Países como Haití, Guatemala, Bolivia, Honduras y Belice tienen una edad mediana inferior a los 22 años, siendo los más jóvenes de una región que debe aprovechar todo su potencial y energía para encarar un futuro prometedor.
Desafíos como la urbanización (América Latina y el Caribe es la segunda área con mayor porcentaje de población urbana, un 80%) obliga a planificar desde ya el porvenir de la región. Para ello hay que convertir en realidad el lema de la campaña de una manera lo más participativa posible: “Cuentas conmigo, cuento contigo”.
