En las últimas dos décadas se han impulsado numerosas iniciativas orientadas a incorporar una perspectiva étnico racial, de género, intercultural y de derechos humanos en las agendas nacionales y se han dado los primeros pasos para sistematizar el análisis de la situación de los derechos de las personas afrodescendientes en América Latina y el Caribe.
Dado que la violencia del racismo se conecta directamente con las violencias de género, el enfoque interseccional y de género permite visibilizar las consecuencias de la discriminación racial para el ejercicio de los derechos de las mujeres afrodescendientes. No incorporar ambos factores al análisis puede llevar a la errónea consideración de que la violencia es igual para el conjunto de mujeres, sin que se preste atención a las especificidades de las violencias a las que se enfrentan por el cruce de la racialización y el género. De ahí la importancia de estudiar, prevenir, abordar y atender el tema desde un enfoque étnico racial, de derechos humanos, de género e interseccional.