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Anlli y Diana: rompiendo el ciclo del embarazo en adolescentes para construir sus proyectos de vida

Anlli y Diana: rompiendo el ciclo del embarazo en adolescentes para construir sus proyectos de vida

Historia

Anlli y Diana: rompiendo el ciclo del embarazo en adolescentes para construir sus proyectos de vida

calendar_today 10 Junio 2025

Portada
Campañas como “Tú No Ta’ Pa’ Eso” y espacios seguros como las Casas Clave están transformando comunidades, empoderando a adolescentes para construir proyectos de vida propios. ©UNFPA República Dominicana

ESTEBANÍA, República Dominicana - “Uno de mis mayores sueños es tener hijos”, nos dice Anlli, una joven de 18 años que vive en la comunidad de Estebanía, Azua, al sur de República Dominicana. El momento será “luego que tenga mi carrera avanzada”, agrega la adolescente que estudia diseño de modas en la universidad. Su voz refleja la determinación de una generación que busca escribir su propia historia, una que rompa con el ciclo del embarazo temprano, una realidad latente en el país.

República Dominicana es uno de los países de América Latina y el Caribe con mayores índices de reproducción en la adolescencia, con una tasa de fecundidad de 77 por cada 1000 mujeres de entre 15 y 19 años. En lugares como Azua, donde antes se registraban los números más altos, algo está cambiando. El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) ha estado colaborando con el Gobierno y la comunidad, integrando información, acceso a servicios de planificación familiar y consejería para empoderar a jóvenes como Anlli.

"Tú No Ta' Pa' Eso": el impacto de la información

Anlli es una de las decenas de adolescentes y jóvenes de Estebanía que ha sido parte de "Tú No Ta' Pa' Eso", una campaña impulsada por el UNFPA a través de jóvenes que comparten con sus pares información vital sobre sexualidad y los riesgos del embarazo temprano. "En las charlas siempre nos decían cómo cuidarnos. Por más que uno quiera tener relaciones, nuestro cuerpo no está preparado ni mental ni físicamente, y uno tampoco está preparado económicamente", recuerda Anlli. Le explicaron la importancia de los métodos anticonceptivos, desde inyecciones y píldoras hasta condones o el DIU.

Convencida de que la planificación familiar es fundamental para su proyecto de vida, Anlli comenzó a acudir con su novio a la Unidad de Atención Primaria (UNAP) para recibir consejería y métodos anticonceptivos. "Empecé a tomar la píldora, pero luego quise probar otros métodos para ver cómo reaccionaba mi cuerpo, aunque al final volví a la píldora", cuenta. Su meta es clara: "Tener dos hijos cuando yo pueda lanzar mi marca de ropa. Siento que si me pongo a tener hijos antes de comenzar a tomar frutos de mi carrera, no les podré dar la vida que se van a merecer."

Esta perspectiva personal sobre la maternidad tiene raíces profundas en la experiencia de su madre, quien la tuvo con tan solo 16 años. "Mi mamá siempre me ha dicho que cuando ella me tuvo, no tenía ni siquiera conocimiento de los métodos anticonceptivos, porque eso era un tabú". Su madre, que tuvo que empezar a trabajar muy joven debido a una situación económica difícil, siempre le recalcó: "Yo no quiero ni que ustedes ni mis futuros nietos pasen por esas cosas. Entonces yo les recomiendo que se hagan de una profesión, que la ejerzan y entonces ahí ustedes pueden comenzar a reproducirse." Anlli cree firmemente que antes de tener hijos, la persona debe estar consciente de lo que implica criar un bebé, no solo a nivel mental sino también económico, dada la cantidad de gastos y responsabilidades.

Fortalecimiento de servicios para adolescentes

La experiencia de Anlli en la UNAP fue transformadora. El UNFPA ha trabajado junto al Gobierno para fortalecer estos servicios, promoviendo la confidencialidad y el acceso sin barreras de adolescentes y jóvenes. En 2024, 241 profesionales del sistema de salud recibieron capacitación especial para colocar y retirar métodos anticonceptivos de larga duración, como el DIU y el implante subdérmico. Gracias a esto, la demanda de dichos métodos aumentó significativamente en la provincia de Azua, en un 27% para el DIU y un 19% para el implante subdérmico, en comparación con 2023.

Los resultados de este esfuerzo son claros, como lo confirma el Dr. Lainer Calderón, quien ha trabajado en la UNAP de Estebanía por 14 años. En 2012, recuerda, había 24 adolescentes embarazadas en una comunidad de 11,000 habitantes. Ahora, gracias a la intervención del programa, comenta que hay tres embarazadas.

Estos resultados son posibles al asegurar que adolescentes y jóvenes tengan opciones para decidir y las condiciones para lograr sus metas reproductivas, lo que implica eliminar las barreras que les impiden acceder a los servicios de salud. Si no iban vestidas ‘adecuadamente’, el personal de salud antes no las atendía. Ahora piensa que deben ser aceptadas y las consultas facilitadas.

El miedo al juicio o a ser expuestas ante sus familias o la comunidad solía ser otra de las barreras para muchas chicas. Para romper con esto, el UNFPA impulsó la creación de una unidad de atención para adolescentes en la UNAP, un espacio único y confidencial. Las jóvenes pueden entrar directamente a la unidad para planificarse y buscar consejería, sin tener que pasar por la sala de espera general. Además, dice el Dr. Calderón, “facilitamos el diálogo y les permitimos que hablen abiertamente, vemos su preocupación y la abordamos de la mejor manera”.

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Opciones que permiten proyectos de vida diferentes a la maternidad temprana

“Cuando inició el proyecto de disminución de embarazos en la adolescencia en la comunidad de Estebanía, era inimaginable pensar que un adolescente llegaría a la universidad y se convertiría en profesional, porque la dinámica era llegar a los 14, a los 15 años, tener un novio, salir embarazada y tener hijos.” dice el Dr. Calderón.

La situación ha cambiado, como se ve con el ejemplo de Diana Carolina, otra de las jóvenes de Estebanía que ha podido desarrollar un proyecto de vida diferente a la maternidad temprana gracias a las opciones que ha tenido. Es médico interno y está cursando el ciclo de ginecología y obstetricia. “Que yo priorizara mis estudios en vez de un embarazo en la adolescencia tiene mucho que ver con la educación que me dieron mis padres y cómo me hablaron sin ningún problema de esos temas”, afirma Diana. Agrega que la red de apoyo que tiene, por ejemplo, con la campaña "Tú No Ta' Pa' Eso", “nos ayudó mucho a darnos cuenta de los factores de riesgo que tiene un adolescente de salir embarazada”.

Si bien el acceso a la anticoncepción ha mejorado, la educación sexual en las escuelas del país sigue siendo limitada. Muchas chicas y chicos simplemente no saben dónde ir. Otras temen represalias de sus familias o comunidades. La lucha no es solo sobre la anticoncepción, se trata de cambiar mentalidades.

Casas Clave: acercando la prevención a la comunidad

Complementando el trabajo de la UNAP, las Casas Clave son una parte fundamental de la estrategia. Estos son puntos de consejería y distribución de anticonceptivos, operados por lideresas capacitadas como Evelyn Sánchez, una enfermera con más de 10 años de experiencia que lidera la Casa Clave de Estebanía desde hace más de 8 años. Ella ofrece consejería y métodos de planificación familiar desde su casa, de una forma confidencial, gratuita y en horarios flexibles, de manera que no haya necesidad de desplazarse al centro de salud.

Hoy, ya hay más de 50 de estas casas funcionando a nivel nacional, y el Ministerio se encarga de que tengan los anticonceptivos necesarios.

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Evelyn lidera la Casa Clave de Estebanía, ofreciendo consejería y anticonceptivos que empoderan a las jóvenes a forjar un futuro diferente. ©UNFPA República Dominicana 

No solo las tasas de embarazo están disminuyendo, sino que muchas de las jóvenes de su Casa Clave han interrumpido el patrón del embarazo temprano. "Varias de mis chicas son ahora profesionales; otras son madres, pero porque querían, no porque la vida las obligó a hacerlo."

La reducción de los embarazos en adolescentes en esta comunidad es evidente. Ya Azua no es una de las provincias de República Dominicana con más embarazos en adolescentes, y sus jóvenes tienen ahora más oportunidades para desarrollarse plenamente.

Anlli, en su camino hacia convertirse en una diseñadora de modas, y Diana, como médico interno, son testimonios vivos de este cambio. Sus historias son recordatorios del impacto de invertir en la educación, en el acceso a servicios de salud y del poder del apoyo comunitario para que más jóvenes como ellas puedan tener opciones, sean libres de tomar decisiones sobre su fecundidad y desarrollen todo su potencial.