PORT-AU-PRINCE, HAITI (25 de enero de 2010) - Muchas mujeres siguen dando a luz en medio del caos y la devastación dejada por el terremoto que golpeó Haití el 12 de enero. Acompañadas por las oraciones y cantos de esperanza de amigos y familiares, estas mujeres se sufren los dolores del parto en plena calle. Hambrientas y sin hogar, traumatizadas por la magnitud mortal de la catástrofe, dan a luz en coches y en tiendas de campaña, en los bancos de los parques o en el suelo desnudo, bajo el sol ardiente, casi sin agua y sin nada que les alivie los dolores del parto que se suman, con frecuencia a los dolores de miembros aplastados o amputados por los efectos del sismo.

 

Las más afortunadas consiguen llegar a hospitales desbordados de gente o a salas de parto improvisadas donde son asistidas por médicos y enfermeras voluntarios que se las ingenian para trabajar con electricidad intermitente y recursos mínimos.

 

Las cámaras de la BBC captaron la desesperada situación de dos de las mujeres que dieron a luz aquí en los últimos días. Ya antes del terremoto, Haití era el lugar de mayor riesgo del Hemisferio Occidental para una mujer embarazada, con un índice de muerte durante el parto del 1 por 47. En estos momentos, con los centros de salud destruidos, la enorme incidencia de lesiones y traumatismos y la malnutrición y la enfermedad generalizadas, podría haber aumentado a niveles dramáticos.

 

 

Se estima que unas 63.000 mujeres embarazadas darán a luz en Haití tras la desgracia del  terremoto. De estas, 7.000 lo harán durante el próximo mes. El quince por ciento de los embarazos requieren atención de emergencia por posibles complicaciones que podrían derivar en la muerte de la mujer. Por otra parte, el riesgo que corren los recién nacidos es aún mayor.

 

Una de las principales prioridades del UNFPA consiste en proteger las vidas de las madres y de sus recién nacidos. UNFPA Haití ya ha repartido 18 “kits de parto limpio” y salud reproductiva entre los hospitales que aún se mantienen en pie, las ONG y las clínicas móviles. Estos insumos servirán para satisfacer las necesidades de 150.000 mujeres por un periodo de tres meses. Los kits se encontraban en un almacén de Puerto Príncipe que no sufrió daños, lo que permitió una rápida distribución de medicamentos de primera urgencia, suministros y equipos para intervenir en partos higiénicos, cesáreas y otras afecciones relacionadas con la salud reproductiva.

 

 

Hoy han llegado a Puerto Príncipe 29 de los 173 kits que el UNFPA tiene previsto entregar en los próximos días. Estos kits están compuestos por medicamentos de primera urgencia, y suministros y equipamiento para llevar a cabo partos higiénicos y emergencias obstétricas, atención post-violación, tratamiento de complicaciones derivadas de abortos inseguros y de otras cuestiones en materia de salud reproductiva, como las infecciones de transmisión sexual.

 

En los próximos días, también llegarán a Haití 20.000 “kits de dignidad”. Estos kits contienen toallas sanitarias, pañales, jabón antibacterial, y otros productos de higiene y limpieza que permitan a las mujeres vivir su maternidad con dignidad y ocuparse de sus hijos, aún en las peores condiciones.

 

El UNFPA también está prestando ayuda de emergencia en la ciudad fronteriza de Jimaní, adonde día tras día llegan personas procedentes de Puerto Príncipe. Cuatro camiones cargados de productos farmacéuticos, suministros y equipamiento médico se han entregado a los hospitales de Jimaní y otras localidades cercanas. Incluyen los productos farmacéuticos para tratar infecciones, antibióticos, antiinflamatorios, anestesia, sueros y fluidos intravenosos.